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Montilla promete créditos-salario de 633 euros mensuales a los jóvenes que ni estudian ni trabajan

El PSC ha presentado en su programa electoral la promesa de dar un crédito-salario de 633 euros mensuales, que es el salario mínimo interprofesional (SMI), durante nueve meses a los jóvenes de 18 a 24 años que ni estudian ni trabajan, los denominados "ni-nis", si se ponen a estudiar y, durante tres meses más, si se ponen a buscar trabajo.
Lunes, 22 de noviembre de 2010
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Además, les dará una beca de formación durante estos meses para pagar los estudios. También ha hecho la promesa de dar un crédito salario de 11.399 euros al 0% de interés a los menores de 30 años que ya tienen formación pero desean mejorarla. Esta ayuda la habrán de devolver en 6 años a partir del momento en que empiecen a trabajar y tengan un sueldo que supere el doble del Salario Mínimo Interprofesional.

Esta medida podría beneficiar a unas 125.000 personas en Cataluña y costará 1.300 millones de euros a pagar en cuatro años. Se considera que hay 50.000 jóvenes menores de 25 años en paro y con muy poca formación y unos 75.000 menores de 30 años con necesidades de ampliar su formación.

El pasado lunes 25 de octubre en el programa "El Candidato" de Onda Cero, en el que se hizo una entrevista al presidente Montilla, el presidente del sindicado AMES, Antonio Jimeno, le pidió que retirara esta propuesta, porque "va contra el objetivo de educar a los jóvenes en la cultura del esfuerzo". Jimeno dijo que "si nuestros alumnos ven que los jóvenes que estudian o que trabajan o que hacen las dos cosas no reciben ayudas y, en cambio, sí las reciben los que no lo hacen, difícilmente considerarán que vale la pena esforzarse". "Es más, no se debe descartar que algunos de los que ahora se esfuerzan lo dejen de hacer durante un año, para aprovecharse de esta oferta". En cambio, si esta ayuda se dedicara a becas, a transporte, a alquileres de viviendas para los jóvenes y a ayudas para iniciativas personales, los denominados "ni-nis" verían que en este país si se estudia o se trabaja hay ayudas, pero si no se hace, no las hay. Esto sería un gran estímulo para estas personas para empezar a esforzarse, cree Jimeno. En opinión del representante del sindicato de profesores AMES, "dar este salario simplemente por decir que se está estudiando o por decir que se está buscando trabajo, va contra el objetivo de conseguir una juventud más preparada y con más capacidad de esfuerzo".

El presidente Montilla contestó que estas ayudas no se darían simplemente por decir que se está estudiando o por decir que se está buscando trabajo, sino que estas personas "habrían de estudiar realmente y habrían de buscar trabajo de verdad". Añadió que un Gobierno no puede ignorar a un colectivo tan grande y que los otros jóvenes ya tienen becas y otros tipos de ayudas a su disposición.

El portavoz del sindicato AMES considera que la existencia en Cataluña de un 31,5% de jóvenes entre 18 y 24 años que no han acabado el Bachillerato o la FP, cuando en el resto de Europa este colectivo sólo constituye un 14,8% del total, es la prueba más evidente y difícil de disimular del fracaso de nuestro sistema educativo, concretamente de la ESO.

El representante de AMES ha declarado que "entiende que muchos de nuestros jóvenes no encuentren trabajo, dado que el paro juvenil en Cataluña ya afecta al 40% de los que buscan trabajo, pero que no debe aceptarse que estos jóvenes no aprovechen esta situación para estudiar". Considera que la causa que ha generado este gran número de "ni-nis" es que este colectivo "ha obtenido el título de la ESO simplemente por intereses políticos y que, como en realidad no han adquirido los conocimientos necesarios por seguir estudiando, ni los hábitos de trabajo necesarios para hacerlo, ahora su futuro es muy incierto". En su opinión la solución "no debe pasar por dedicar el dinero de todos los ciudadanos en mantenerlos más años sin hacer nada, sino en establecer situaciones que los inciten a empezar a esforzarse". Piensan que "hace falta un acuerdo entre todos los partidos políticos, tanto en Cataluña como en el resto de España, para no caer en la tentación de conseguir sus votos y los de sus padres, con compromisos que la Administración luego no puede hacer cumplir y, por lo tanto, sólo comportan alargar y aumentar el problema".

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